EPL,
25 AÑOS CONSTRUYENDO PAZ
Por Jaime A. Fajardo Landaeta
Twitter: JaimeFajardoLan
El 1 de marzo se cumplirán
25 años de la desmovilización del Ejército Popular de Liberación —EPL—, luego de
varios meses de concentración en campamentos y la prometida dejación de armas. Así,
más de 2.300 hombres y mujeres se integraron a la vida democrática del país con
el respaldo de la mayoría de militantes del Partido Comunista M-L, el Frente Popular,
sindicalistas, universitarios y organizaciones juveniles de su entorno
político.
Antes, debieron
transcurrir más de 10 años de intensa lucha ideológica y política al seno del
partido y la estructura militar, para dimensionar la importancia de que la organización
derivara hacia la lucha democrática y por ende hacia la participación en los
escenarios de la vida política colombiana.
Oscar William Calvo,
vocero ante el gobierno de Belisario Betancur, y Jairo de Jesús Calvo —el comandante
Ernesto Rojas, hermano de Oscar—, le imprimieron una gran dinámica y proyección
al EPL y al partido, al tiempo que apuntalaron sus postulados en el plano
nacional e internacional. Ambos cayeron asesinados: Oscar cuando el gobierno de
Betancur rompió la tregua con las organizaciones guerrilleras interlocutoras en
las conversaciones de paz y Ernesto, ejecutado a sangre fría una vez detenido
por integrantes de las fuerzas del orden.
Desde ese momento y hasta
1990 se cerraron las posibilidades de acceso a nuevos diálogos. Solo a finales
del gobierno de Virgilio Barco y luego en el de César Gaviria hubo acercamientos
que llevaron a la desmovilización y entrega de armas del EPL, el M-19, el PRT y
el Quintín Lame, para ambientar su participación en la Asamblea Nacional
Constituyente de 1991 que promulgó la carta política vigente. Para el EPL este
hecho concretó su incursión en la acción política sin armas.
En consecuencia, sus
integrantes y los del PC ML han ocupado altos cargos en las ramas del poder
ejecutivo y legislativo en los diversos ámbitos territoriales, importantes
líderes sociales y de organizaciones de víctimas del conflicto armado, al igual
que en la academia, como columnistas de prensa y en fin, han demostrado que la
paz sí da frutos. Además abrieron el camino para que el proceso de negociación
en La Habana fuera un hecho.
Es la lección – legado
que deja la guerrilla más grande desmovilizada hasta hoy, cuando se
puede proclamar que ha honrado la palabra. Por esa razón el 1 de marzo
algunos ex militantes del EPL, medios de comunicación, delegados de los
gobiernos nacional, departamental y local, al igual que personalidades de
diversos partidos se reunirán en el parque de Naciones Unidas, frente al
Monumento a la Paz construido con las armas fundidas de esa agrupación, para
manifestar su compromiso con la paz y la reconciliación, apoyar los diálogos de
paz y homenajear a sus compañeros muertos o asesinados durante estos 25 años de
participación en la vida democrática del país. Para esta conmemoración
han adoptado el lema: “25 años construyendo paz, EPL”.
Desde los más variados
ámbitos los ex EPL les han demostrado a los colombianos que valió la pena haber
enfrentado el gran reto de trabajar con ahínco por el invaluable legado de Oscar
William y de Ernesto Rojas, y aportar a la reconciliación nacional.
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